#CONSEJOSCARE | Macarena Rivera (47) tenía 5 años cuando a su madre le diagnosticaron cáncer de mama. A esa edad, no tenía mucha noción de qué pasaba, pero a medida que crecía se dio cuenta de que su madre no quería mostrarse vulnerable frente a sus hijos. Cuando falleció, Macarena decidió hacerse un examen genético, ya que tenía antecedentes familiares de cáncer además por su abuela y bisabuela. “Estaba muy nerviosa, pero me lo hice porque presentía algo. Quise afrontar mis fantasmas y así poder tomar una decisión a tiempo”.
El examen arrojó una mutación del gen BRCA1, un factor de riesgo de esta enfermedad. En ese momento se dio cuenta de que debía actuar, ya tenía dos hijos (de 4 y 1 año) y sólo pensaba en el futuro de ellos si llegase a tener cáncer. Inició una búsqueda intensa para saber cómo podría reducir el riesgo. Vive en Puerto Varas así que viajó a Santiago y visitó a varios especialistas. De esta manera concluyó, que podía hacerse una mastectomía profiláctica doble y a los 40 años extirparse útero, ovarios y trompas. Llena de dudas pero con gran convicción decidió empezar ese proceso.
“Fue un periodo duro y lleno de miedo, yo no tenía cáncer y quería someterme a estas operaciones, pero mi Isapre no cubría mi operación por ser preventiva. Además, tuve que alejarme de mis hijos más de un mes. Cuando se acercaba la fecha de operarme, se me apretaba la guata y el corazón”, cuenta Macarena. A pesar de la pena de dejar a sus hijos y el miedo que conllevaba operarse, estaba convencida de que era lo mejor para su salud y la de su familia.
De esta experiencia, Maca rescata el ejemplo que le da a sus hijos y a sus cercanos. “Mis hijos son personas más fuertes y resilientes porque ven a su madre como una mujer que luchó por estar viva para ellos y verlos crecer sana. Me siento más madura y en paz. Estoy orgullosa de la fuerza interna que tuve para tomar esta decisión a tiempo”.
Gracias @macarena_rivera123 por tu #ConsejosCare: “El aprendizaje hacia otras mujeres es que sean decididas en hacerse el examen genético, empoderarse y tener certeza de que es posible encontrar una alaternativa para prevenir el cáncer. Puede ser duro, pero está en nuestras manos dar un giro al destino y elegir la vida”.
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